La crónica del Mercat Medieval de Calafell 2015

Siempre había ido como visitante, y como tal me encantaba asistir, pero desde la perspectiva de paradista este Mercat ha sido inolvidable. Dos días y medio que empezaron casi con malos augurios, montamos el género lloviendo bajo los todos de plástico azules que tenemos para estos casos pero que deslucen totalmente la parada, pero al entrar la noche y cesar la lluvia la gente no desistió de dar su paseo y entretenerse mirando las paradas que había a montones y de lo más variado. De artesanía de todo tipo, de talleres, de comida, etc Tuvimos unos vecinos simpatiquísimos  y los dos días siguientes fueron de maravilla. El tiempo acompañó, la afluencia de visitantes también. Recibimos visitas de amigos, y familiares, y de amigos de amigos, lo cual te alegra mucho la estancia la verdad. Tuve un reencuentro de lo más inesperado con mis primas Encarna, Antonia y Loli a las que hacía tantísimo tiempo que no veía y que vinieron especialmente a verme (con el marido de Encarna, gracias!). Fue algo realmente emotivo, precioso, una maravillosa sorpresa.
Hubieron actividades divertidísimas, el mercado de "esclavos" fue de lo más pintoresco, los malabaristas del fuego, la trapecista alucinante  ... Las desvergonzadas Tirantinaires con su puesto de saquitos aromáticos, que te deleitan con sus canciones picaronas (cuidadín con los novios y maridos, que estas llevan mucho canalillo).
Tambien hicimos algunos contactos muy interesantes, con tiendas y otras organizadores de otras Firas que se interesaron por nuestras piezas.
En definitiva, ha sido un Mercat bonito, fructífero y muy entretenido, al que no dudéis en asistir para las próximas ediciones, encontraréis muchas cosas interesantes, entre ellas a nosotros, porque repetiremos, seguro. Os dejo algunas fotos de nuestra parada, Gracias a todos los que nos visitasteis, y los que no, os esperamos la próxima Fira!
Así quedó nuestro cartel.



Desde la trastienda.